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Domingo en el jardín

Domingo en la mañana
qué voy a desayunar
en la huerta hay un banquete
de lo más sensacional.

Mi abuela con mi abuelo
sembraron muchos manzanos
cada octubre los miramos
florecer bajo el vuelo de los bichitos
que de flor en flor se llevan el polen.

Sabrán ellos lo dulce
sabrán ellos lo buena que es
la fruta que nos regalan
estos árboles.

No hay fruta sin esos bichos
dice mi abuela mirándome
por eso sembramos flores
para los insectos atraer a nuestra huerta
que tan generosa nos da de comer.

Y bajo tierra
un mundo misterioso en verdad
bacterias, hongos, lombrices y mucho más
que silenciosamente mantienen la vida
en este planeta que gira.

Domingo por la tarde
ya me dio hambre tanto jugar
me espera un plato con verduras
deliciosas para cenar.

Mi abuela me hizo una sopa
tantos colores no sé nombrar
papas, habas, chalotas, choritos, algas
que rico está
que suerte tengo
de habitar la tierra y también el mar.

Y por la noche
una fiesta muy concurrida y especial
escarabajos, lechuzas y mucho más
que silenciosamente mantienen la vida
en este planeta gira.